Ruido Blanco es una señal de sonido que contiene todas las frecuencias. Cuando estamos en presencia de este tipo de señales,  se estimula la corteza cerebral, aumenta la capacidad cognitiva y mejora las habilidades para el estudio y la concentración, ya que produce activamente espacios de calma, abriendo espacio a la creatividad.

Es en este marco que, pensamos y creamos este programa  de artistas, situado en la ciudad de Puerto Iguazú, donde se generan fuentes inabarcables de frecuencias

Convocamos artistas, escritores, fotógrafes, antropólogues, sociólogues, curadores, a explorar este territorio de diversidad cultural y de extraordinaria biodiversidad, a convivir con otrxs artistas durante un mes en un retazo de selva frente al río Iguazú, una casa que coexiste y convive con coatíes y tucanes, mariposas y arañas, primavera y sonidos vivos.

Les artistas seleccionades realizarán su proyecto durante el mes de Septiembre, acompañades  de talleres proyectuales, salidas culturales y visitas a estudios de artistas locales y actividades abiertas a la comunidad, y compartiendo sus procesos en un estudio abierto.
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Al pensar la naturaleza desde el ruido y la muerte, desde lo efímero, la integración y la creación de lazos con la comunidad y la estimulación del pensamiento creativo e inmersivo, Ruido Blanco se propone como espacio de reflexión del arte, desde trabajo, pero también desde el ocio y la amistad.

Planteamos un espacio que propone dislocar, destruir y matar ideas de manera colectiva, para crear nuevas. Somos les ames de nuestra cultura. Entendemos el hacer estético como práctica de lo sensible, producto de la actividad humana en el orden del sentimiento, la emoción y los vínculos.